Cada año, el florecer de los cerezos indica la entrada de nuevos alumnos a Kimberly, la prestigiosa escuela de magia. Entre ellos se encuentra Oliver Horn, quien se queda embelesado por una peculiar joven con un extraño atuendo y que porta una espada japonesa. Tras su ingreso, Oliver empezará a darse cuenta de que las cosas en Kimberly no son como él esperaba.